La intérprete británica Adele dará un giro trascendental en su carrera al debutar en la gran pantalla de la mano del visionario diseñador y cineasta Tom Ford. Este movimiento marca un nuevo capítulo para la artista, quien se encuentra en un período de pausa musical tras sus exitosas residencias en Las Vegas y Múnich.
La confirmación de esta noticia, reportada inicialmente por la prestigiosa publicación Deadline, ha generado una considerable expectativa mediática. El proyecto no solo significa el regreso de Tom Ford a la dirección tras su aclamado filme Animales Nocturnos (2016), sino que también catapulta a Adele a un nuevo terreno artístico, consolidando una colaboración que promete ser uno de los eventos cinematográficos del año.
El ambicioso proyecto de Tom Ford
Tom Ford, el genio creativo detrás de marcas de lujo como Gucci e Yves Saint Laurent, prepara con sumo detalle su tercera incursión en el cine. Se trata de la adaptación de la novela dramática A Voice to Heaven (Cry to Heaven) de Anne Rice, una historia de ópera y venganza ambientada en la Italia del siglo XVIII.
El elenco que rodeará a Adele es de primer nivel, e incluye a figuras consolidadas como Colin Firth y Aaron Taylor-Johnson, junto al talento emergente de Owen Cooper, el ganador más joven de un Premio Emmy. La decisión de Ford de elegir a la cantante para su ópera prima actoral subraya la confianza del director en su potencial interpretativo.
Un camino natural hacia la actuación
Aunque sorprende a muchos, el interés de Adele por la actuación no es nuevo. Hace años, la artista ya insinuó esta posibilidad en una entrevista con The Guardian, expresando su deseo de trabajar con el director Xavier Dolan. Si bien en esa ocasión su colaboración se limitó a la banda sonora de Mi vida con John F. Donovan, la semilla de la actuación ya estaba plantada.
Por su parte, Tom Ford ha sido claro sobre su pasión por el séptimo arte. En declaraciones a GQ, el cineasta afirmó que dirigir películas es “lo más divertido” que ha hecho en su vida y que planea dedicar las próximas dos décadas exclusivamente al cine, dejando atrás el mundo de la moda. La combinación de su visión estética única con la poderosa presencia de Adele crea una fórmula irresistible.
La noticia del debut actoral de Adele bajo la dirección de Tom Ford no solo redefine la trayectoria de la cantante, sino que también promete entregar al cine una película cargada de drama, lujo y una intensidad emocional característica de ambos artistas. Toda la industria aguarda con expectación este encuentro de titanes.
